“POPY, cuando seamos muy viejos y nos muramos, yo creo que el cielo será exactamente así. Estaremos juntos, así, jóvenes, como somos ahora, y estaremos en esta misma cama”.
…
Eso es LOST.
El final de LOST no ha sido el capítulo final de una serie: ha sido UN PREMIO.
Un premio para los personajes y un premio para nosotros, los losties, los fans de la serie, que hemos sentido y padecido junto a ellos durante estos inolvidables 6 años de amor, misterio, aventura y ansiedad que el pasado domingo llegaron a su fin.
Me he emocionado con muchas series en los últimos años (con BUFFY, con A DOS METROS BAJO TIERRA, con la primera temporada de TRUE BLOOD, con el piloto de GLEE…), pero hacía mucho, desde TWIN PEAKS, que no sentía una emoción tan viva y tan real con una serie de televisión como con LOST.
La serie de los doble 0, de la era internet.
La serie post 11S.
Ese thriller espiritual… Esa ciencia-ficción… Mucho tiempo tendrá que pasar hasta que una serie logre volver a introducirnos en una mitología propia similar, surgida de la nada.
Muchos espectadores pobres de espíritu buscan explicaciones. Se creen con derecho a exigirlas… Siento lástima por todos ellos. Lástima de que sean incapaces de disfrutar del MISTERIO con mayúsculas, lástima de que no sepan disfrutar una obra de arte desde la emoción en lugar de desde la razón.
El arte no necesita explicación.
Pero hablemos de este último capítulo en cuestión…
LOST. 6X17 y 6X18. THE END.
El cariño que siento hacia todos los personajes de LOST es directamente proporcional al tremendo placer que sentí siendo testigo de su reencuentro y redención. El reencuentro de SHANNON con SAYID, de SAWYER con JULIET… El momento en el que aparece la negra y el viejo con el perro VINCENT…
La redención a través del amor.
Me encanta (y sinceramente no me lo esperaba) que HUGO haya quedado como guardián de la isla.
Es el giro más audaz y la evolución más lógica que se le podría dar a su personaje.
Me lo imagino perfectamente en ese riachuelo, anciano, sentado, tipo YODA. E imagino, viéndole anciano, que de joven tuvo que ser como exactamente fue.
HUGO siempre ha representado al fan friki de LOST y darle la isla a él es como decir que ahora la serie es de ellos. Nuestra.
Una maravilla.
Me encantó la lucha entre Jack y el humo negro convertido en hombre.
Una lucha crepuscular y apocalíptica.
Ese beso entre JACK y KATE al borde del acantilado diciéndose que se aman…
Y llegó el momento del clímax… Tengo que reconocer que en un popy’s cut, la secuencia de la iglesia se hubiese quedado en la sala de montaje.
Obviamente me alarmé cuando el padre de Jack le dice a su hijo que está muerto. Y como yo todo el planeta, supongo. En un capítulo tan hipnótico y fascinante, ese momento en la iglesia suponía todo un jarro de agua fría.
Pero yo, al contrario que, al parecer, mucha gente, seguí escuchando la conversación entre JACK y su padre, así que para los que no hayan escuchado bien lo que CHRISTIAN le dice a JACK, aclararé ciertas cosas… NO ESTÁN TODOS MUERTOS.
Los protagonistas no murieron en el accidente de OCEANIC.
La isla no es un purgatorio.
La isla es real.
Lo que es un purgatorio, o mejor dicho, el PUNTO OMEGA, es la realidad paralela de esta última temporada.
LAPIDUS, KATE, CLAIRE, RICHARD (me encanta que escape RICHARD de la isla…) y MILES escapan en el avión y no están muertos.
La realidad paralela es un espacio que ellos han creado para encontrarse en la otra vida. Da igual que unos hayan muerto ya o que vayan a morir dentro de 50 años. Los que han muerto pueden reencontrarse ahí con quien aman.
Como yo, si muriese, con JAIME, en la cama de Delft.
El amor siempre ha sido la constante de LOST.
Fin.
Nos quedamos en la sesión de fotos de MARIO MARTÍN para CINESHOCK.
JULIO, MIGUEL, ANDRÉS y yo nos tumbamos en el suelo mientras nos tiraban harina por encima.
Muertos de una fosa común cubiertos de cal viva.
Entonces SONIA BRIZ, maquillada por ELI, como recién salida de una película de BRIAN DE PALMA y con un bañador 90’s de scream queen de JESSICA ABOU NASSAR para SODA POP, se tiró encima nuestro, necrófila, excitada de revolverse entre muertos.
MARIO, mirando a través del objetivo, no daba crédito ante la salvaje y castiza fotogenia de SONIA. Entusiasmado, no podía dejar de disparar fotos y le tuvimos que decir que parase.
Qué ganas de ver los resultados…
Nos quitamos el maquillaje, nos pusimos nuestra ropa y bajamos con SONIA, que su noviazo la esperaba abajo con el coche.
Como lo de aparcar por el centro es una odisea, fuimos con el coche a Príncipe Pío a tomar una COCA COLA en una terraza, recordando con SONIA el Madrid de finales de los 90.
Un Madrid en el que ser popular tenía mucho mérito, ya que no existía FACEBOOK.
Al día siguiente, MIGUEL, JULIO y yo fuimos al showroom de WRANGLER a por ropa.
WRANGLER nos viste para CINESHOCK.
Yo pillé unos vaqueros oscuros, sin manchas ni nada, y una camisa BROKEBACK MOUNTAIN muy chula.
Quedamos con ELI, que iba muy guapa con un flequillo postizo.
¿Habéis visto el nuevo vídeo de GOLDFRAPP?
ALIVE.
La misteriosa lesbiana vuelve la vista a los 80 justo cuando ya estamos en pleno revival 90, pero nunca es tarde si la dicha es buena. Con ALIVE firma un vídeo del que ya podría aprender LADY GAGA.
Una sacerdotisa disco-satánica que canta enfrente de unos monjes maquillados como KISS. Entonces la lesbiana del pop lanza unos rayos láser muy XANADÚ y crea a unas chicas que hacen aerobic, muy PHYSICAL de OLIVIA NEWTON JOHN. Las chicas del aerobic se convierten en vampiras y se comen a los rockeros. GOLDFRAPP vuelve a su ataúd de neón.
Un 10.
Y llegó LA NOCHE HENENLOTTER en CINESHOCK.
Una vez más abríamos los CINES LUNA para proyectar BRAIN DAMAGE y FRANKENHOOKER, las dos obras maestras del director de BASKET CASE.
Abríamos puertas a las 21:30 y a dos horas antes ya había gente sentada en la cola.
Pero esto mejor ya os lo cuento el viernes.
popyblasco@gmail.com
Canciones para el IPOD:
- SHOW MY ASS de DOMINIQUE YOUNG UNIQUE.
- GET IT RIGHT de YAS.
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